La belleza peruana Esther, ansiosa por unirse a un elenco espacioso, llega temprano para un masaje. La masajista, ansioso por complacer, ofrece más que un alivio. A medida que el masaje se profundiza en un encuentro seductor, las inhibiciones de Esther se derriten, lo que lleva a una sesión caliente e inolvidable.